Hoy, más que nunca, todas las fuerzas progresistas debemos actuar en coherencia y unidad. Por lo mismo, creo que no es posible enfrentar este reto sin liderazgos que se posicionen en el testimonio. Por decirlo de alguna forma, necesitamos más del gladiador y menos del padrino, debemos atrevernos a declarar lo que somos y, por ende, nuestra visión de sociedad...
Nos gusta un estado más fuerte, nos gustan los derechos más universales, creemos en el mercado pero regulado, creemos en la organización y en los espacios comunitarios como lugares privilegiados para avanzar y resolver la vida diaria... y por ende, en la comuna y en la región, debemos pelear con convicción que entre los derechos las personas debe estar el poder contar con un sistema político que los represente...
¿Desde cuándo en el siglo 21 necesitamos democracias tuteladas? ¿Cuál es el rol de la gente en la comunidad país que formamos? ¡No más binominal! Mayor participación real y, por último, necesitamos instituciones públicas eficientes y al servicio de los grandes propósitos…
¿De qué modernización hablamos si, en promedio, más del 40% de la dotación municipal es a honorarios? ¿De qué modernización, si más del 60% del presupuesto se decide a nivel central?
Por lo mismo, este año que se avecina es uno de definiciones y debemos invitar a que sean de todos... y no sólo de algunos… si un 40% piensa en chile y un 60% no se siente llamado a participar... no es posible hacer cambios que perduren…
